La Junta de Andalucía declara nuevos municipios turísticos como Rute en Córdoba, Monachil (Granada), Cartaya (Huelva) y Álora (Málaga).
Actualmente, Andalucía cuenta con más de 30 municipios turísticos, entre ellos Roquetas de Mar y Níjar en Almería, Chiclana de la Frontera, Chipiona, Conil de la Frontera, Rota y Tarifa en Cádiz; Almuñécar en Granada, Almonte, Aracena, Punta Umbría e Isla Cristina en Huelva, Baeza, Cazorla y La Iruela en Jaén; Benalmádena, Fuengirola, Nerja, Ronda, Torremolinos, Frigiliana y Antequera en Málaga, o Aznalcázar y Santiponce en Sevilla.
La declaración de Municipio Turístico de Andalucía puede ser solicitada por aquellas localidades o ciudades cuya población de derecho no sea superior a 100.000 habitantes y en las que concurran requisitos como que el número de pernoctaciones diarias en media anual en los negocios de alojamiento turístico sea superior al 10% de vecinos del municipio, según las cifras del padrón municipal declaradas oficiales, o que se alcance este porcentaje durante al menos tres meses al año.
El municipio seleccionado debe acreditar que posee un plan municipal de calidad turística y de una oferta consistente que se base en recursos patrimoniales, naturales, culturales, etnográficos, deportivos o de ocio, y que cuente con unas infraestructuras mínimas para atender a sus turistas.
Por ello, estas localidades tienen población inferior a 100.000 habitantes, acreditar la población turística asistida, a través del número de visitas turísticas o de pernoctaciones, acreditar la oferta turística y su infraestructura turística , detallar el plan municipal de calidad turística, realizar actuaciones dirigidas a potenciar y mejorar las actuaciones y servicios con incidencia en la actividad turística.
Además, en los procesos de planificación turística que lleven el municipio debe incluir mecanismos de participación ciudadana y de los agentes económicos y sociales; integrar la conservación del patrimonio cultural y natural; apostar por un turismo respetuoso, ecológico y apoyo al medio ambiente.
La localidad dispondrá de planes de accesibilidad para la supresión de barreras arquitectónicas, urbanísticas y de transporte, de oficinas de turismo accesibles convenientemente señalizadas y equipadas, de existencia de recursos turísticos en el término municipal, declarados de interés turístico o de interés cultural. Además de medidas de defensa y restauración del patrimonio cultural y urbano, distintivos y certificaciones de calidad de los recursos y servicios turísticos que tenga el municipio, etc.